No es fácil llamar la atención en un centro de convenciones que tiene un tamaño equivalente a 40 campos de fútbol: eso es lo que se proponen los productos –y las marcas- que participan en la feria CES.
El Consumer Electronics Show 2013, que tiene lugar en la ciudad estadounidense de Las Vegas esta semana, tiene una audiencia estimada en 150 mil asistentes, entre periodistas, analistas y empresarios (y no está abierta al público general).
Más de 20.000 productos, más de 3.000 marcas: cifras apabullantes para la que es considerada la más grande muestra de tecnología del mundo
Televisores, con ultradefinición e inteligencia
Mayor tamaño, definición y funcionalidad.
Sin duda se han llevado los titulares de este CES: son las televisiones que tendremos en las salas de nuestros hogares, que no escatiman en tamaño y funcionalidad.
La tendencia de la que todos hablan es el 4K o UltraHD, un nuevo estándar de súper alta definición que deja mal parado a cualquier equipo actual: tiene cuatro veces la resolución de una televisión HD de 1080p. Samsung presentó una de estas TV 4K con un tamaño de 85 pulgadas, que es casi una pantalla de cine para la casa y muestra una nitidez asombrosa.
También las pantallas OLED –siglas que identifican a una tecnología distinta para fabricar televisores, basada en diodos orgánicos de emisión de luz- fueron protagonistas, con la primera en salir al mercado anunciada por la compañía surcoreana LG para marzo: alta definición en 55 pulgadas y apenas medio centímetro de espesor.
Pero hay más: pantallas curvas de OLED –lo que permite, según los fabricantes, corregir la visión defectuosa en los bordes, que se da por cómo vemos los humanos-, equipos que personalizan contenidos para cada integrante de la familia en base sus hábitos de consumo previo y, quizás, el fin del reinado del control remoto con televisores que responden a gestos y comandos de voz. Eso sí, a precios aptos para pocos, de entre US$8 y 12 mil.