jueves, 2 de mayo de 2013



El centro de la Tierra está tan caliente como el Sol


Ilustración de las capas de la Tierra
El núcleo interno de la Tierra es cristalino.
Nuevos cálculos sugieren que el núcleo interno de la Tierra está mucho más caliente de lo que sugerían experimentos anteriores, a una temperatura de 6.000 grados centígrados, más o menos tan caliente como la superficie del sol.
El núcleo sólido de hierro es cristalino y está rodeado por el núcleo externo que es líquido y está en movimiento, lo cual genera el campo magnético terrestre.
Un nuevo experimento usó rayos X para sondear pequeñas muestras de hierro bajo una extraordinaria presión con el objetivo de examinar cómo esa materia cristalina se forma y se funde. Los resultados fueron publicado en la revista especializada Science.Pero la temperatura a la cual ese cristal del núcleo sólido se puede formar ha sido motivo de debate durante mucho tiempo.
El análisis de las ondas sísmicas registradas tras los terremotos en todo el mundo puede proporcionar mucha información sobre el grosor y la densidad de las capas de la Tierra, pero no pueden indicar su temperatura.
Eso debe ser calculado en un laboratorio o a partir de modelos informáticos que simulan el interior de la Tierra.
Buscando un acuerdo
"Tenemos que darles respuestas a los geofísicos, a los seismólogos, a los geodinámicos; necesitan ciertos datos con los que alimentar los modelos informáticos"
Doctora Agnes Dewaele
Las mediciones de principios de los años 90 de las "curvas de fundido" del hierro, a partir de las cuales se puede deducir la temperatura del núcleo interno, sugerían una temperatura de unos 5.000 grados centígrados.
"Entonces era sólo el principio de este tipo de mediciones así que fueron una primera estimación para determinar la temperatura dentro de la Tierra", dijo Agnes Dewaele, de la agencia de investigación francesa CEA, coautora de la nueva investigación.
"Otros investigadores hicieron otras mediciones y cálculos por computadora y no se llegó a ningún acuerdo. No es bueno para nuestro campo estar en mutuo desacuerdo", le dijo a la BBC.
Determinar la temperatura del núcleo es crucial para todo un número de disciplinas que estudian distintas regiones del interior de nuestro planeta a las que nunca tendremos un acceso directo y que guían nuestro conocimiento para todo, desde los terremotos hasta el campo magnético de la Tierra.
"Tenemos que darles respuestas a los geofísicos, a los sismólogos, a los geodinámicos; necesitan ciertos datos con los que alimentar los modelos informáticos", dijo la doctora Dewaele.
Visión con rayos X
Por eso su equipo acaba de reconsiderar esos más de 20 años de mediciones utilizando las instalaciones del European Synchrotron Radiation Facility, que tiene una de las fuentes de rayos X más intensas del mundo.
Para replicar la enorme presión sobre el límite del núcleo terrestre, que es más de un millón de veces mayor que la presión a nivel del mar, usaron un artilugio llamado en inglés "diamond anvil cell", esencialmente, una muestra minúscula de hierro sostenida entre las puntas de dos diamantes sintéticos de precisión mecanizada.
Una vez que las muestras fueron sujetas a altas presiones y a altas temperaturas usando un láser, los invetigadores usaron rayos X para realizar una "difracción", es decir, para hacer rebotar los rayos X sobre el núcleo de los átomos del hierro y ver cómo cambiaba el patrón a medida que el hierro cambiaba de sólido a líquido.
Esos patrones de difracción ofrecen información sobre los estados del hierro parcialmente fundido, que es lo que el equipo cree que los primeros investigadores midieron en sus primeros experimentos.
Los científicos ahora sugieren una temperatura del núcleo interno de 6.000 grados, pero lo importante, según la doctora Dewaele, es que "ahora todo concuerda".

No hay comentarios:

Publicar un comentario